La publicidad comunica. Aún cuando no cuenta toda la verdad, siempre contiene cierta verdad. Cómo mínimo, nos dice lo que el dueño de la publicidad siente la necesidad de decir.
Con eso en mente, comparemos dos publicidades de IBM. Una de los 60’s y otra del presente, y dibujemos una línea para ver a donde se mueve la industria.
Para empezar, maravillemosnos con la ‘Explosión del Papeleo’
La estética es abrumadora, parece salida directo de un episodio de Mad Men. Habla de un tiempo muy complejo, pero aún así mucho más simple que el presente. Al papeleo lo presentan como un mal necesario, algo con lo que lidiar lo mejor que se pueda.
Completamente opuesto al mantra de hoy en día: ‘los datos son oro‘.
En ese entonces parece insoportable. El video pinta una realidad muy gris, el papeleo es necesario pero no hay quien lo haga ni tiempo para hacerlo.
La solución? En la mejor manera estadounidense, nos confronta una explosión, seguido de un granjero sabio.
Mírenlo, tranqui con su pipa en el medio de un campo de maíz, soltando esta sabiduría:
Parecería que necesitamos ayuda.
¿Cómo discutir con eso? Obviamente, IBM es quien brinda la ayuda, con este eslogan estratégico:
Que las máquinas trabajen, que las personas piense.
Es genial. La idea implícita es que IBM proveera una maquina para el papeleo. Alguien tendrá que manejarla, y ese humano sera mucho más productivo, dejando tiempo para pensar. Tiempo que se necesitara, por que alguien tiene que entender a la maquina, no había YouTube ni técnicas de UX en ese entonces…
Saltemos al presente. Medio siglo después, que nos dice IBM:
¡Cuanto cambian las cosas! Es difícil ver donde las maquinas terminan y empiezan las personas. El ‘pensar’ ya no le pertenece sólo a las personas, sino que lo comparten con las maquinas. Las personas son llamadas inteligentes por trabajar con maquinas inteligentes. Se han integrado.
Pero si las maquinas ahora ‘piensan’, ¿qué hacen las personas con el resto del tiempo extra?
Bueno, si recorrieron la playlist de videos, una nueva temática aparece. Ya no hay tanta tensión, las personas en la oficina parecen haber aprendido del granjero, y su interés parece ser cuidar a los demás.
Esas son las huellas de IBM, ¿a donde apuntan?
Bueno, el siguiente paso lógico sería que las maquinas hagan lo que las personas están haciendo ahora. Es decir, que las personas y las maquinas compartan el acto de cuidar a los demás. La integración del cuidado.
¿Cómo es que las maquinas están cuidando ahora? ¿Cómo crees que nos cuidaran en el futuro?